©PIXABAY
Los grupos o chats donde se difunden ‘nudes’ y ‘packs’ son en realidad un mercado sexual virtual en donde trabaja una red de forma organizada.
Activistas en contra de la violencia digital explican que las imágenes que se difunden en los grupos o chats son en realidad un mercado sexual virtual en donde trabaja una red de forma organizada.
Se han detectado tres patrones para obtener fotografías de mujeres quienes no autorizaron su consentimiento.
Uno de esos patrones es que hay grupos de hombres que se encargan de tomar las fotografías a mujeres en el transporte público o con cámaras ocultas en baños públicos, vestidores y hoteles, estas imágenes las envían a otras personas encargadas de recopilarlas.
Una segunda modalidad, otros grupos se dedican a hackear cuentas de redes sociales de las víctimas y de ahí descargar imágenes con contenido sexual en este caso se guardan datos personales de las víctimas como nombre, teléfono y dirección.
En la tercera modalidad detectada, las víctimas envían fotografías a sus parejas o exparejas, aquí hay un consentimiento de la víctima, pero a veces en venganza las parejas o expresas difunden estas imágenes y ahí no. hay consentimiento de la mujer afectada.
Generalmente esos chats donde se difunden fotos íntimas sin consentimiento se mueven en redes sociales como WhatsApp, y Telegram, sin embargo, entrar a esos chats no es fácil.
Una de las formas más comunes para entrar a esos chats es que uno de los integrantes invita a otra persona, envía un link de acceso, esta modalidad a veces también se les pide dinero para permitir ser miembro de estos chats.
Generalmente en este tipo de chats los administradores bloquean datos como nombre y teléfono y se conocen solamente por los alias.
La segunda modalidad es la de intercambio, solo se da acceso a aquellas personas que aceptan compartir material íntimo de mujeres así los administradores se aseguran de que la persona forma parte de la misma red delictiva.
La reforma conocida como Ley Olimpia penaliza la difusión de contenido íntimo en las plataformas digitales sin el consentimiento de las víctimas. Son 22 estados en el país los que han aprobado esta reforma. (iM-rrc)
